sábado, 29 de noviembre de 2008

NO al castigo físico

Levanta tu mano pero que sea contra el castigo físico

Algunos estudios afirman que aproximadamente la mitad de los adultos españoles utilizan el cachete o el azote en la educación de los niños. No solo están quebrantando los derechos de los pequeños, como también están utilizando técnicas ineficaces para educarlos.
En alguna ocasión, ¿quién no ha dado un cachete a su hijo? Aunque muchos saben que no es la mejor forma para hacer razonar al niño, y que tampoco le disciplinará, siguen insistiendo en ello. El castigo físico no corrige al niño. Creo que sólo alivia el enfado de los padres. La agresividad, en cualquiera de sus modalidades, derriba cualquier labor educativa tolerante, paciente y constante. Una torta no enseña a los niños que deben respetar las normas, y tampoco les aplican límites.

Educar con razonamiento es mucho más difícil, lo sabemos, porque requiere paciencia y persistencia, pero es mucho más fructífero. Lo mejor sería poner el niño a pensar, a reflexionar en algún rincón, sobre lo que hizo de malo. Pegar a los hijos carece de sentido. Puede crear un alivio inmediato a los padres, pero un recuerdo dificil de olvidar para los hijos.

El castigo físico es una práctica tan extensa como reprochable en todo el mundo. Pensando en ello, el Consejo de Europa creó una campaña, titulada Tus manos son para proteger. Levanta la mano contra el c astigo físico, para sensibilizar sobre la necesidad de suprimir estas técnicas tan enraizadas en la sociedad, creando una consciencia en los padres, educadores y a los adultos en general, de que los niños tienen derechos, y no se les deben someter a conductas como bofetadas, cachetes, azotes, gritos, vejaciones, etc., que ningún adulto toleraría
.
Los niños tienen el derecho a la protección

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Perdonad chic@s pero estoy totalmente en desacuerdo. El castigo físco puntual y leve, es decir, el azote de toda la vida (jamas justificaría el empleo sistemático de la fuerza o el maltrato) no es para nada una práctica inútil. Con los niños hay que razonar, hasta que la razón se acaba y es cuando hay que dejar claro quién está al mando de la nave.
Ya os lo dije antes, tener referencias de autoridad es fundamental para la integración normal en la sociedad. No hablo de represión, pero si de poner límites.
En fin...... pensadlo.
Carlos

Aurora García García dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Aurora García García dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Aurora García García dijo...

El articulo por si no lo has leido bien hace referencia a los usos continuados que utilizan muchos padres en los metodos de displina, por cualquier motivo en vez de hacer pensar y razonas al niño simplemente usan el maltrato físico.

No creo que el uso continuo de abofetadas, tortazos etc se le pueda llamar disciplina, y hay que tener en cuenta las repercusiones futuras, presentes, que esa violencia fisica y tambien psicologica provocan en el niño.

Hay otros caminos para que los padres puedan imponer límites y ejercer su autoridad.

Anónimo dijo...

Hola!! Yo pienso que no esta mal dar un azote en un momento determinado, pero en un caso extremo en que las palabras hayan perdido toda su autoridad para recuperar el control. Pero no estoy a favor ni lo estaré de el uso continuado de la violencia como forma de resolver una situación que se pudiese resolver con palabras. Es decir, uno vale pero dos, NO.
Ana B.